El diseño original de este modelo lo hizo Standard Elektric Lorenz (ITT) en Alemania, concretamente en Stuttgart y recibió el nombre de “Assistent”. Muy pronto fue copiado por Bell Telephone Manufacturing Co. de Amberes (también ITT), donde se le llamó “Assistant”. En sus primeros tiempos, Telefónica también estaba bajo el control de ITT. Los estadounidesnses, finalmente, decidieron venderle el modelo a Telefónica y ésta decidió llamarlo “Heraldo”. .
En 1961, Telefónica lanzó al mercado este icono del diseño y ahí arrancó la verdadera historia del teléfono heraldo. Se trataba, por tanto, del primer teléfono para la mayoría de los españoles.
Las herramientas para el Teléfono Heraldo se fabricaron, parte en Bélgica, parte en España. En 1963 Telefónica decidió crear la macro fábrica de Citesa en Málaga para centralizar allí la gran producción de Heraldos.
Las décadas de los años 60 y 70 fueron los años de gloria en la historia del teléfono heraldo. Se comercializaron modelos en diversos colores: blanco, verde, azul, rojo o gris. Se creó también el modelo “mural”, un Heraldo destinado a colgarse en la pared. Incluso posteriormente, a principios de la década de los años 80, se comercializaron modelos con botonera que sustituían a la clásica rueda del Heraldo.
Además, la gran expansión del teléfono Heraldo vino acompañada de la aparición de una gran gama de accesorios como el timbre supletorio, un avisador luminoso o una rueda para aumentar el sonido.
Finalmente, el Teléfono Heraldo dejó de producirse a finales de la década de los años 80, principios de los 90. Eso sí, a día de hoy, es considerado como un icono del diseño industrial del siglo XX. Se trata, sin duda, de un pedazo de nuestra historia que ha alcanzado el reconocimiento entre los amantes de los objetos antiguos.